Los icónicos hoteles de Anguilla reabren sus puertas.
En junio pasado, Anguilla fue declarada como un destino “sin casos” de COVID-19 por la Organización Mundial de la Salud y continúa en la clasificación de “Sin aviso de salud para viajeros: riesgo muy bajo para COVID-19” por el Centro de Control de Enfermedades de los Estados Unidos. Hasta el momento, no hay casos activos o sospechosos en la isla y el gobierno implementó nuevos protocolos de seguridad para la segunda fase de reapertura de Anguilla desde el 1 de noviembre.
Los viajeros deben completar una aprobación previa en línea, proporcionar un resultado negativo de la prueba obtenido de tres a cinco días antes de la llegada y un seguro médico que cubra los posibles tratamientos relacionados con COVID-19. Después de realizar una prueba de PCR a la llegada, los huéspedes podrán relajarse en la “burbuja” de su alojamiento aprobado durante 10 días (o 14 días si la prevalencia del virus en el país de origen es superior al 0,2%). Posterior a una segunda prueba negativa, el Ministerio de Salud autoriza a los huéspedes a explorar la isla. Los detalles, incluidas las tarifas aplicables, se pueden consultar en el sitio web de la Oficina de Turismo de Anguilla en www.ivisitanguilla.com/escape.
Con esto, algunos de los resorts más famosos, hoteles boutique y demás propiedades de Anguilla empiezan a recibir huéspedes, como:
- Four Seasons Resort & Residences Anguilla
- CuisinArt Golf Resort & Spa Anguilla
- Belmond Cap Juluca
- Frangipani Beach Resort
Otro que reinicia es el Tranquility Beach, el resort más nuevo del destino que ofrece tarifas reducidas hasta el 15 de noviembre de 2021, excepto en feriados. Inaugurado en enero de 2020, la propiedad se encuentra en Meads Bay, en el West End. Este oasis boutique ofrece una experiencia híbrida de hogar y hotel en 15 casas de lujo que pueden ser de una, dos y tres habitaciones con vistas a la playa o al mar. Es el único complejo que tiene una terraza al aire libre con bañera privada de agua fría o caliente, cocina y lavandería.
Las casas están disponibles para alquileres de temporada desde US$ 350 a US$ 5,000 por noche según la unidad y la temporada e incluyen bebidas frías y toallas a la llegada, una botella de champán o vino de cortesía por semana, pastelería francesa todas las mañanas, refrescos y agua de cortesía y vales para bebidas diarias en la playa, deportes acuáticos con descuento y música en vivo. También es posible comprar propiedades a partir de US$ 650,000. Además, hay opciones de grupos para bodas, retiros corporativos, largas estadías y familias.
Como el área de Tranquility Beach es parte de la “burbuja” de la región de Meads Bay, los huéspedes que estén de vacaciones en el lugar pueden nadar en el mar, usar sillas de playa y, desde mediados de noviembre, pueden cenar en el Straw Hat, Blanchards y otros restaurantes. Disfrutar del golf con distanciamiento social en el CuisinArt Golf Resort & Spa, alquilar un bote para hacer esnórquel o preparar una barbacoa de langosta en una playa desierta, también son opciones para los huéspedes de la zona. Tan pronto como sean autorizados por el Ministerio de Salud para explorar la isla, se pueden agregar servicios de spa y chef.
En el resort, los huéspedes pueden realizar remo, kayak y yoga; jugar voleibol de playa y hacer ejercicio en el gimnasio local. O para un ritmo más relajado, pueden disfrutar de un ponche de ron típico frente a la playa, compartir una puesta de sol y una botella de vino en el jacuzzi privado, tomar una clase de arte o cocina en línea. El complejo fue certificado como Ambiente Seguro por el Ministerio de Salud y el equipo realizó una capacitación exhaustiva. De igual manera implementa protocolos de saneamiento y servicio de alimentos, usa equipos de protección personal (PPE) y brinda asistencia sin contacto al huésped.
Fotos: Jeremy Austin.